Sin recompensa (JiKook) Capítulo 7 - Noche
CAPÍTULO 7 — Noche
Jimin
POV:
Acabé el vaso de agua que había ayudado a tomarme una pastilla para mi catarro y regresé a mi cuarto para ver a Kook dentro de mi cama acurrucado entre las sábanas. Observé detenidamente su rostro mirándome, esperando a que me acostara junto a él.
—¿Qué haces aquí? —Me miró confundido.
—¿Dónde pretendías que durmiera? Tu camiseta ya no me sirve.
—¿Y para eso la destrozaste? —mi tono era severo pero tan solo intenté provocarle.
—Y yo que sabía que me iba a convertir en esa abominación...
—No digas eso. Eres precioso. —Y según dije eso me colé entre las mantas que le cubrían para abrazarle y besarle la cabeza. Apagué las luces que aun permanecían en el cuarto y todo quedó a oscuras.
Me tumbé en la cama y él se abrazó a mi pecho para quedar allí acurrucado. Acariciaba su pelo y a cambio recibí un ligero ronroneo que perdía mi cordura. Su respiración y aquel sonido era lo único que me acompañaba hasta que comenzó a hablar.
—¿Ya te encuentras mejor?
—Si Kook.
—Me asustaste antes. Estabas muy rojo.
—Solo estaba aliviando tensiones. Lo siento, hacía mucho que no tenía relaciones ni siquiera yo solo. No volverá a pasar.
—¿Qué hiciste?
—¿No sabes? —yo no paraba de acariciarlo.
—No.
—Kookie... a veces las personas tenemos instintos, como los animales. —no podía verlo pero sabía que alzó su cabeza para intentar mirarme—. Y necesitamos tener sexo.
—Pero solos no podemos tener descendencia. Necesitamos una hembra.
—No es para tener hijos, Kook. Es por placer.
—¿Placer?
—¿Qué sientes cuando comes una galleta de chocolate?
—¡Está muy rica, hyung! —su voz se tornó rápidamente animada. Tan inocente...
—Pues es una sensación mil veces mejor.
—¿En serio? ¡Yo quiero probar el placer!
—Un día te enseñaré, Kookie... —no escuché con precisión exactamente la promesa que acababa de hacerle.
—No me gusta "Kookie"... —Dijo cambiando de tema segundos más tarde.
—¿Quieres un nombre de persona?
—¡Sí!
—¿Cuál te gusta?
—Alex.
—Odio ese nombre. —Ambos pensamos por un momento—. ¿Jeongguk?
—Mmm... ¡Me gusta!
—¿Puedes permitirme al menos que en algunos momentos especiales te llame Kook? Siempre serás mi gatito...
—Vale hyung. —aceptó resignando.
—Ahora a dormir Kook...
—No puedo hyung... el olor de esta almohada me está enfadando...
—¿Cómo? —le pregunté revolviéndome bajo él.
—Aquí ha dormido una chica. —Miró la almohada que sostenía su cabeza.
—Sí, mi ex novia.
—Aun huele a ella. Es horrible. —De un manotazo lanzó el cojín lejos de él tirándolo al suelo.
—Jeongguk...
—Ahora mejor... Me gusta cómo hueles hyung... —Se abrazó aun más a mí y su ronroneo se hizo más intenso. No podía para de acariciar sus orejitas y continué así hasta quedarme dormido.
Su voz, sus gestos. La forma en la que me mira cuando no entiende. La inocencia que veo en él, la capacidad que tiene para soportarme y la bipolaridad que le controla. Cómo sonríe cuando consigue lo que quiere, estoy dispuesto a morir por esa tonta sonrisa que le obliga a mostrar todos sus dientes.
Sus besos, la fuerza con la que me sostiene impidiéndome ir. Sus cariñosas palabras inconscientes, sus miradas atentas y sus preguntas desesperantes. Estoy completamente loco por todas estas cosas. Y sin embargo no puedo encontrar un pequeño defecto en este ángel caído del cielo.
¿Qué me está pasando? Me estoy enamorando de un gato.
Comentarios
Publicar un comentario