POR TI, TODO MENOS MI DIGNIDAD (Yoonmin) - Capítulo 10 - Curiosidad
Yoongi POV:
Doy otro trago a la botella de soju sintiendo
el interior de mi boca quemar, igual que mi garganta a medida que el líquido
desciende por ella. Respiro profundo una vez al ardor desaparece y puedo
continuar caminando completamente mareado. Me doy cuenta que a medida que pasan
los años tolero más el alcohol y por eso busco más cantidad para ingerir, este
es mi tercer botellín de soju y aun me mantengo en pie.
Siento mi mente irse de vez en cuando
momentáneamente y mi vista del mismo modo. Me gustaría decir que soy lo
suficientemente maduro como para no tomar en serio todas las veces que me han
golpeado pero mentiría. Esta es la única forma que tengo de superarlo,
emborracharme hasta caer rendido en la cama. Mirarme los golpes y no recordar
cómo me los he hecho. Reírme de lo sucedido o llorar por la ignorancia en la
que viven las personas a las que quiero.
Apoyo mi mano en la pared del pasillo y apenas
siento su tacto sobre mi palma, lo cual hace que me desequilibre y caiga al
suelo rompiendo la botella a mi lado. Ya no quedaba apenas líquido por lo que
nada se derrama. El único problema son los cristales rotos en el suelo. Pero
debo ser sincero, no creo que vaya a sentirlos en el caso de cortarme con
ellos.
…
Jimin POV:
—¿Quieres algo de comer? —La voz de Tae me saca
de mi ensoñación, por lo que aparto la vista de la televisión para mirarle a él
sentado a mi lado.
—Oh... Tengo hambre... pero no sé qué comer...
—Tengo de todo pero si quieres pedimos unas
pizzas...
—OK.
Él se levanta y se dirige al teléfono que está
en la mesilla a nuestro lado, marca, y unos segundos después ya esta
describiendo el pedido que queremos. No hace falta que yo le dé indicaciones,
él sabe perfectamente la comida que me gusta.
Hoy Jungkook no ha podido venir a su casa porque
tenía no sé qué de problemas familiares, pero casi lo prefiero porque mi
problema es con Tae, y en este momento me siento un poco incómodo por lo que
dijo el otro día de mí en clase. Es necesario que pusiéramos orden por lo que
me llamó unas horas después de que me marchara de esa manera del aula y me
pidió perdón, me repitió una y otra vez que no debía haberme dejado solo y que
no volvería a humillarme.
Sin embargo, y a pesar de todo, sigue siendo un
poco raro estar en su presencia.
—Ya está. —De nuevo se sienta a mi lado en el
sofá y seguimos viendo un programa de televisión en el que apenas presto
atención.
—Tae... —Me mira durante unos segundos hasta
que comienzo a hablar de nuevo—. ¿Todo está bien entre nosotros? No quiero
perderte como amigo...
—Claro Jimin. —Pasa su brazo por mis hombros
haciéndome sentir pequeño y me estrecha en su pecho ahogándome—. Pero tengo
curiosidad. —Me suelta y me obliga a sentarme cara a cara frente a él—. ¿Qué
ocurrió allí dentro cuando nos fuimos?
—Nada extraño, antes de golpearle se me
abalanzó y tropezamos con el banco. —Rememoro todo la escena en mi mente, esta
vez, la real—. Me golpeé la cabeza al caer y por eso tengo esto. —Señalo el
trozo venda de mi cabeza—.
—¿Y él imbécil te ayudó a ir a la enfermería?
—Sí...
—Debe estar colado por tus huesos...
—¡YAH! Deja de decir esas cosas. —Un escalofrío
improvisado recorre mi cuerpo haciéndole ver que la sola idea me desagrada.
—Yoonmin~ Yoonmin~ —Canturreaba tornándome
enfadado. Golpeo como una chica despechada su hombro y una vez veo que no se
detiene me vuelvo tan infantil como él.
—Yo también quiero preguntarte algo, —digo con
la cara de cotilla más infantil que puedo. Él se detiene al instante y se
acerca a mí como si le fuese a contar el secreto más oculto—. ¿Cuántas veces se
la has chupado a Kookie? ¿Mmm?
Su rostro se vuelve serio y se cubre la boca
con las manos. Creí que me golpearía pero se queda estático mirándome con los
ojos como platos. Pasados unos segundo, habla.
—¿Te lo ha contado? —Sin evitarlo me aferro al
sofá completamente en tensión y sorprendido por haber acertado en algo como eso
sin ninguna intención. Dejo de respirar y por consiguiente no soy capaz de
vocalizar nada en absoluto.
Y de repente comienza a reírse tanto que veo
como se muere. Su cara roja parece querer explotar y su rostro se contrae de
dolor por la risa. Le golpeo dándome cuenta de que ha sido una broma por su
parte aprovechando mi mal gusto para hacerle rabiar.
—Eres idiota.
—Y tu demasiado inocente. Homófobo. Creí que te
había dado un infarto. Debías haber visto tu cara.
Lo veo reírse tan duramente... pero yo no
quiero reír.
…
Yoongi POV:
Llego al cuarto de baño a duras penas y me miro
unos segundos en el espejo intentando enfocar la vista en mi reflejo pero
resulta complicado. Hago un esfuerzo y veo mi rostro sudoroso y pálido. Mis
ojos húmedos recorren mi cuerpo buscando algo que merezca la pena. Quito mi
camiseta y veo mis costillas manchadas de moratones que con el paso de los días
se han tornado azules y amarillos. Otros no son más que pequeños dibujos
difumados con el color real de mi piel.
Duele, pero no siento el dolor. Es horrible a
la vista y sin embargo estoy demasiado acostumbrado a verlo, aunque no lo suficiente
como para que resulte agradable. Palpo con mi mano allí y me obligo a apretar
todo lo que puedo hasta sentir el dolor nublar mi vista. Tengo que sentirlo,
debo recordarlo para ser fuerte y sin embargo me obsesiono con beber para
olvidar.
No quiero olvidar los golpes, quiero olvidar
las manos que me dañan, la mirada que se deleita con mi sufrimiento, el rostro
que insiste en aparecer en mi mente cada vez que lloro, cada vez que suplico,
cada mañana cuando me despierto y pienso: "Allí va a estar él de
nuevo".
…
Jimin POV:
Nos sentamos en la mesa de su salón y
comenzamos a devorar la pizza que acababa de llegar, degustando cada mordisco.
Una vez tenemos espacio en la boca para las palabras Tae habla primero.
—¿Qué han dicho tus padres? Ya sabes, sobre los
golpes.
—Ah, no le han dado demasiada importancia. Yo
les dije que me había resbalado en la ducha del gimnasio y la versión similar
de la enfermera ayudó bastante.
—Me alegro. ¿Qué crees que dirían si supieran
todo lo que hacemos con Yoongi?
—Tal vez me internasen en un centro
psiquiátrico. —Ambos reíamos.
—Bueno, pues ya está, todo ha terminado.
—De eso nada. —Le miro frunciendo el ceño—.
Este maldito Suga va a cobrar pero bien.
—Tu veras... pero procura que antes estés
completamente recuperado. No quiero más disgustos. —Él intenta cambiar de tema
pero mi mente sigue dándole vueltas a una misma idea.
—Hay una cosa que sigo sin entender. —Expreso
mis dudas en alto—. ¿Cómo es que sus padres nunca han venido a hablar con la
tutora? ¿O no se han presentado exigiendo explicaciones por sus golpes? ¿Ellos
no se preocupan por...? —Tae me detiene.
—¿No lo sabes?
—¿El qué? —Realmente estoy intrigado.
—Él vive solo aquí. Pensé que te lo había
dicho. —Dejé de comer por unos minutos.
—¿Y tú como sabes esto?
—Hace dos años y medio, cuando comenzamos las
clases en este instituto, ambos vinimos de Daegu y estuvimos un tiempo hablando
antes de entrar en clase. Comenzamos a hablar a consecuencia de que ambos
venimos del mismo lugar, sin embargo cuando le pregunté dónde vivirían él y su
familia a partir de ahora, él me dijo que su familia no se había movido de
Daegu, él se instalaría solo en una casa por ahí.
—¿No es muy joven para vivir solo? —Es cierto
que ahora yo no soy tan joven, pero cuando comencé esto, sí. Y no me hubiera
imaginado vivir sin mis padres.
—Eso pienso yo, no sé.
—¿Dónde vive? —Insisto.
—Y yo qué sé. Pregúntale a él.
—¿Qué más sabes de él? ¿Lo viste alguna vez
antes de venir a Seúl?
—Sí, por supuesto. Estudiábamos en institutos
que estaban a menos de un quilómetro de distancia entre ellos. Pero tan solo lo
conozco de vista.
—Oh... —Suspiro decepcionado.
—¿Ocurre algo? Si quieres saber cosas sobre él
solo tienes que preguntarle. Pero, ¿a qué viene esta curiosidad repentina?
—Nada, olvídalo.
—Ahora que soy sincero, el Yoonmin se ve
realmente adorable. —Lo miro realmente furioso—. Ambos de la misma altura y con
una atracción envidiable. Una parejita de gnomos~
Canturrea sacándome de mis casillas en menos de
un segundo, pero al menos era una buena salida a mi curiosidad por Yoongi.
…
Yoongi POV:
Apoyo mi mano en el espejo y acerco mi rostro
allí donde puedo verme con más claridad. Mis ojos temblorosos no son valientes.
No quieren asumir todo lo que ven ahora mismo. Tampoco serían capaces de
asimilarlo. Sin poder evitarlo mis brazos se apoyan instintivamente en la
cerámica del fregadero y mi cabeza se ve inclinada vomitando todo lo que he
comido en las últimas doce horas junto con el soju que la ha impulsado a salir.
Estoy así tanto tiempo que no soy capaz de
definir una cifra. Cuando siento que no hay más comida para vomitar escupo todo
lo que ha quedado en mi boca y me siento en el suelo al lado del retrete
esperando para la siguiente arcada y dejarme llevar por ella.
Noto un olor nauseabundo que invade mi baño y
por consiguiente mis fosas nasales. Respiro ese aroma tan familiar y me apoyo
en mi brazo estirado esperando que el sueño llegue rápido y placentero.
Comentarios
Publicar un comentario