DESDE EL ORFANATO [PARTE II] (Jimin x V) - Capítulo 28
Capítulo 28
Jimin POV:
Pasa una semana desde entonces y la
situación se estabiliza. Es increíble cómo llegamos a actuar porque lo peor de
todo no son las duras palabras que nos dijimos sino que la tensión continúe entre
nosotros. Me encantaría hacerles ver lo mucho que quiero a mi hermano, todo lo
que me importa y sin embargo no sería ético. Es extraño ¿cierto? No poder
querer a mi hermano de la manera tan impura en que lo hago.
Y a pesar de todo no me separo de él, es
más creo que estamos más unidos porque me he dado cuenta de que somos nosotros
contra ellos, desgraciadamente porque esto no hay forma de ganarlo.
—Eres adorable. –Ha hecho un aegyo
exagerado pero aun así se ve delicioso. Me siento en su cama frente a él y
agarro violentamente sus piernas para colocarlas sobre las mías cruzadas y se
entrelazan en mi cintura. Me sujeto en su cadera y sus brazos rodean mi cuello
para besarme.
—No deberíamos hacer esto.
—¿No te gusta? –Le pregunto conociendo la
respuesta.
—Como entren… idiota. –Saco mi lengua
haciéndole burla pero sus labios van a ella para chuparla. Mis ojos se abren
sorprendidos.
—Te vas a enterar. –Mis dientes se lanzan
a morder su cuello aunque intenta resistirse. Ríe a la par que se queja pero lo
que más me llama la atención es que no se esconde de mí, es más, expone más aún
su cuello a mí para que sea mordido.
—¡Niños! –Rápidamente me aparto de él y él
de mí. Nuestros corazones se paralizan y me veo en la obligación de mirar a los
ojos a nuestra madre en la puerta.
…
—Pero hyung. –Interrumpe Jungkook—. ¿No es lo mismo que nos sucedió a ti y a mí con tu esposa?
—Exactamente
lo mismo.
—¿Cómo es
posible? –Ríe.
—Si la
primera vez lo pasé mal, imagínate la segunda. "Los pueblos que olvidan su
historia están condenados a repetirla" Winston Churchill.
…
—Mamá… —Sus ojos asqueados y horrorizados
nos acusan de algo de lo que no tiene ni idea. Tae se queda ahí parado haciéndome
portavoz de la situación y cuanto me hubiera gustado explicarla pero no sé qué
es exactamente lo que sus ojos han visto, más que dos hermanos tonteando.
—¡Jimin! –Oigo los pasos de papá subir
rápido las escaleras—. ¡Es tu hermano!
—¡No hacíamos nada! Lo prometo.
—¿Qué ocurre? –Aparece papá y nuestra
madre le abraza hundiendo su rostro en el hombro de su marido.
—¡Estaban besándose, estaban mancillando
tu apellido!
—¡Mentirosa! –Insulto por primera vez a mi
madre en toda mi vida. —¡Solo estaba jugando con él!
—¡No sé qué hacer, cariño! –Llora mi madre
en los brazos de mi padre.
—Mamá, no hacíamos nada malo.
—Jimin. –Habla mi padre—. Eso es tan feo…
abusar de un chico más joven que tú…
—¿Abusar? –Pregunta tae detrás de mí, aun
sentado en la cama—. Papá, él no me estaba haciendo nada en absoluto.
—Ahora lo entiendo, esto es de mutuo
acuerdo. –Sus fuertes brazos rodean el cuerpo de mamá.
—¡Nada! ¡No ha pasado nada!
—¡De ahora en adelante no volveréis a
estar juntos! ¡Ni un solo segundo!
—¡Mamá!
—Nada de ir al mismo colegio, nada de
cuartos contiguos. Se acabó. Os internaremos en… —Nada me dolía más que mi
corazón. Sus palabras eran como pequeños puñales clavándose en mis carnes uno a
uno. Comprendo que es aquí donde pago mis penitencias. Estoy claudicando mis
pecados a unas reprimendas demasiado estrictas. No sobreviviré, de eso estoy
seguro.
—¡BASTA! ¡HE DICHO QUE BASTA! –Taehyung se
levanta de donde está y pasa como una bala por mi lado apenas pasándome
desapercibido. Cuando quiero darme cuenta está arremetiendo contra mi madre en
los brazos de mi padre. Y estos al verse en su camino también los golpea.
Yo me paralizo deleitándome con lo que
veo. Mi hermano. Mírenlo, hermoso ¿verdad? Y he aquí mi Dios, perdonando mis
penitencias, mis debilidades y compadeciéndose de ellas hasta el punto de
involucrarse físicamente. Claramente no vamos a salir vivos de eso. ¿Qué más
da? No volveré a ver a mi hermano y sin duda moriré en la agonía de su ausencia
pero me llevo este recuerdo. La imagen de mi preciosa vida luchando por mí, por
lo que somos y por lo que quiere.
No sé qué diablos hacer. Mi madre llora
intentando separar a Taehyung, mi padre, caído en el suelo cubre su rostro con
los brazos que son golpeados por los puños de Tae. Y yo me paralizo y sonrío.
Lo amo demasiado, supongo. Mi amigo, mi hermano, mi novio.
…
Las llamas ante nuestros ojos son
brillantes a la par que imponentes. Suenan incluso y me siento temeroso de que
me consuman a mi también igual que están tragándose el precioso oso de peluche.
El objeto que ha provocado toda esta situación y sin embargo no me siento
aliviado porque con él no se va el problema. Taehyung, sentado a mi lado en el
sofá se recrea en nuestro odio al ver a nuestro padre tirar el juguete ahí y
avivar el fuego para que pase rápido.
La idea de mandarnos a un orfanato o un internado está aún presente pero no tanto como ellos quisieran. Creen que todo acaba aquí o eso creí yo también pero no, nada de eso. Al parecer toda su técnica cambiaría en cuestión de días.
Comentarios
Publicar un comentario