LÍBRANOS DEL MAL (Jimin x JungKook x Yoongi) - Capítulo 6
CAPÍTULO 6
YoonGi POV:
Todo un cosquilleo inunda mi cuerpo.
No siento mis piernas y tampoco mis brazos. Nada. No siento nada. Estoy sentado
en algo. No sé que es pero no puedo moverme. Solo mis ojos funcionan para
mostrarme una imagen horrible ante mis ojos. Sangre, sangre por todas partes.
En mis manos, tiradas y muertas sobre mi regazo corre la sangre abajo sobre mis
piernas. Quiero gritar y siento que grito pero nada oigo más que un murmullo de
fondo que poco a poco desaparece para dar paso a un silencio que duele.
-¡Yoongi! –Los gritos de Jimin me
sobresaltan y me incorporo en la cama llevándome las manos al pecho-. ¿Una
pesadilla? –Me pregunta aturdido. Yo asiento con los ojos cerrados con fuerza.
-Que miedo, había mucha sangre…
-Te lo he dicho. Demasiados cuentos de
terror. –Me reprende pero antes de terminar sus palabras ya me está abrazando y
me tumba a su lado en la cama para que pueda dormir bajo el abrigo de su
protección.
-No podía moverme. Y mis manos estaban
llenas de sangre. –Sigo diciendo aunque mi rostro lo tape su pecho.
-Ya pasó, solo ha sido una pesadilla.
–Me acuna en sus brazos y a los minutos mi corazón ralentiza y rápido olvido lo
que ha pasado.
…
Tal vez haya sido el miedo que aún
permanece instalado en mi cuerpo o el mal estado que me dejaron mis padres ayer
pero por todo el día no he podido escribir nada en absoluto y el estrés por el
retraso se acumula como una espina más. Y como no, lo pago con Jimin.
-Te dije que no era buena idea. –Le
suelto mientras estoy sentado en el sofá sin venir a cuento. Él estaba en la
cocina y se asoma mientras seca un plato para responderme aturdido.
-¿Qué dices?
-Lo de mis padres. ¿No puedes
conformarte con cómo estamos? Ellos siempre lo estropean todo.
-No me imaginé que iba a pasar esto,
lo siento. –Me pide perdón con una sonrisa en el rostro y regresa a la cocina
para continuar con su tarea. Él se ha subordinado a mi enfado pero para mí no
es suficiente. Tengo que pagarlo con él.
-Siempre tengo que hacer lo que
quieres. –Vuelve a aparecer ahora sin nada en las manos. Su expresión
preocupada me perturba y me enfurece más.
-¿Qué te ocurre, Yoongi…?
-Por tu culpa ayer tuve que pasar el
peor rato de mi vida. ¿Y para qué? Para que me humillaran.
-Tampoco fue un buen rato para mí pero
ya te he pedido perdón, no volveré a pedirte que…
-No, ya creo que no. –Sigo mirando la
tele sin prestarle atención y poco a poco se acerca a mí en el sofá.
-¿Qué ocurre? ¿He hecho algo mal? –Se pretende
sentar a mi lado pero yo me levanto y me voy a la cama.
-Me voy a dormir. –Me siento bien. Me
siento fuerte y autoritario pero en el momento en que me tapo con las sábanas
algo dentro de mí se llena de remordimiento y me arrepiento de hacer lo que he
hecho. A los minutos, el cuerpo de Jimin se tumba a mi lado dándome la espalda
y ambos sabemos que no estamos dormidos. Que queremos hablar de lo extraño que
me ha ocurrido y yo quiero pedirle perdón, pero no puedo. Mi orgullo me lo
prohíbe.
…
Mi móvil suena en la mesilla y rápido
me levanto para descolgar y preguntar aun dormido.
-¿Sí?
-¿Min Yoongi? –Preguntan.
-Sí, soy yo.
-Mire, soy del periódico “La costa de
Busán”, -el periódico donde trabajo-, me gustaría que se pasara por aquí para
organizar una cita con la radio de la provincia. Quieren entrevistarle por su
gran talento. –Me levanto de golpe de la cama y doy voces haciendo que Jimin se
gire y se cubra la cabeza con la manta.
-¡Claro que sí! En cinco minutos
estaré allí. –Ya me pongo unos pantalones cualquiera y tiro el móvil apagado
sobre la cama. Me pongo algo en la parte de arriba y salgo del cuarto
recogiendo la cartera y el móvil. Llego a la cocina y un posit, pequeño y de
color amarillo me sorprende en la puerta de la nevera. Lo leo rápido.
No lo
toques.
Abro la nevera viendo media tarta aún
entera y asumo que me dejó eso anoche para que no la comiera. Frunzo el ceño
aun enfadado y tiro el posit arrugado a la basura. Cojo una botellita de zumo
de uva y salgo de casa distrayendo mi mente en la noticia que acabo de recibir
más que en que ahora se dedica Jimin a jugar conmigo a las notitas infantiles.
Comentarios
Publicar un comentario